Al agruparse por color, se pueden diferenciar bien claras las cualidades de cada grupo de alimentos. Los vegetales azules o morados son especialmente benéficos por ser ricos en fitoquímicos. ¿Cuáles son las frutas y verduras oscuras que no pueden faltarte y qué pueden hacer por tu salud?
Las frutas y los vegetales azules y morados contienen poderosos fitoquímicos, son sustancias que protegen al cuerpo de enfermedades peligrosas y se encuentran únicamente en las plantas. Los dos más importantes son la anticianina y los fenólicos.
Tanto la anticianina como los fenólicos, ayudan a prevenir el cáncer y las enfermedades del corazón; contribuyen también a preservar la memoria, a cuidar el tracto urinario y a retrasar el proceso de envejecimiento. Los vegetales oscuros contienen además vitaminas y minerales fundamentales para cuidar la salud.
Además de fitoquímicos, las uvas negras tienen resveratrol, un antioxidante con la capacidad de seleccionar las células cancerígenas y destruirlas. Se ha demostrado que la uva es antioxidante y antidiabética, y que evita la formación de coágulos.
Un compuesto de las uvas, el resveratrol, inhibe el crecimiento de nuevos vasos sanguíneos (angiogénesis) asociado con enfermedades oculares como la degeneración macular relacionada con la edad y la retinopatía diabética.
Los arándanos podrían fortalecer el sistema inmunitario. La fruta contiene compuestos conocidos como derivados de estilbeno, que funcionan junto con la vitamina D para aumentar la función de un gen protector del sistema inmune.
El arándano no sólo es una gran fuente de antioxidantes, también sería un delicioso aliado para proteger la salud: puede ayudar a mejorar o prevenir patologías asociadas al síndrome metabólico, incluyendo la enfermedad cardiovascular.
También contiene una importante dosis de vitamina C y fibra que protege los intestinos. Además, es fuente de potasio, hierro, calcio, taninos de acción astringente y de diversos ácidos orgánicos. Por último, tienen un bajo valor calórico por su escaso aporte de hidratos de carbono.
Un estudio de 2013 comprobó que contiene un compuesto con poderosas propiedades antioxidantes que protegería a las células del daño producido por los radicales libres. En síntesis, la berenjena ¡te mantendrá más joven!
Otro estudio confirmó que la berenjena contiene altos niveles de ácido clorogénico, un compuesto que reduce el LDL o colesterol "malo" y lucha contra el cáncer. Además, ayuda a evitar que las células muten en cancerosas y se enfermen.
Los estudios en humanos han probado los efectos de la remolacha sobre los niveles de azúcar en la sangre, colesterol y presión arterial. No obstante, los resultados son variados. Las primeras evidencias sugieren que sí puede ser beneficiosa para la inflamación del abdomen y las paredes pélvicas.
Un estudio realizado halló que comer remolacha mejora intensamente el desempeño al correr. La clave, según el estudio, estaría en el nitrato, más conocido como “nitrato de sodio” que es usado en carnes, salchichas, tocino y embutidos.
Ésta debe su color a las antocianinas, que según las investigaciones, protege contra el cáncer y mejora el funcionamiento del cerebro. Las pruebas de laboratorio indican que el extracto de col mata virus y bacterias intestinales.
La col provee niveles altos de hierro y sulfuro, dos minerales que limpian el sistema digestivo, y además tiene singrin, un compuesto anticancerígeno. La cosa no termina ahí: hay evidencia de que la col roja es efectiva para tratar las úlceras, reduce el cáncer de seno y previene el Alzheimer.
Las ciruelas son muy ricas en vitamina K, potasio y boro, y esta combinación es muy buena para la salud ósea. El consumo regular de ciruelas secas ayuda a prevenir la osteoporosis y las fracturas, especialmente en las mujeres.
En otros estudios, las ciruelas han demostrado disminuir los niveles de colesterol y controlar la hipertensión. También son útiles para el estreñimiento por ser ricas en fibra, que ayuda a regular el tránsito intestinal: el té de ciruelas es un remedio casero milenario para combatir la constipación.
Se encontró que consumir al menos 100 gramos de cebolla morada cruda al día ayudaría a reducir los niveles de glucosa en pacientes con diabetes 1 y 2 casi tan bien como las drogas; esto se debe a que este alimento es rico en flavonoides y azufre.
Y aún más…
Contienen quercetina, que favorece la salud gastrointestinal. Otro compuesto, el GPCS, fortalece los huesos. Su nivel de cromo y vitamina B6 cuidan el corazón y la convierten en gran antiinflamatorio de los vasos sanguíneos y la garganta. También cura resfriados, reduce la presión y el colesterol.
Muy ricas en antioxidantes y vitaminas. En la prevención del cáncer, los resultados son promisorios aunque no definitivos. Estudios de laboratorios demostraron que las moras tienen propiedades anticancerígenas potenciales.
Sus antioxidantes las convierten en aliadas contra el envejecimiento prematuro de las células. Se destaca su poder para cuidar el corazón y aumentar el HDL o colesterol "bueno". Además, su consumo inhibe la acumulación de grasas en las arterias y ayuda a regular el metabolismo.