Existe controversia con este alimento. Hay quienes dicen, que eleva mucho el colesterol y recomiendan reducir su consumo. Otros en contraposición, recomiendan una ingesta diaria del mismo.
Durante muchísimo tiempo, se recomendó disminuir el consumo de huevo por asociarlo a un riesgo cardiológico, debido al aumento que genera en los niveles de colesterol sanguíneo. Sin embargo, muchos estudios concluyeron todo lo contrario. Con consumir 2 huevos diarios, no se presentan efectos nocivos, ni aumento de los niveles de colesterol.
Aquí, detallamos el aporte nutricional del huevo:
1) Los huevos no aportan fibra ni carbohidratos.
2) A nivel calórico, un huevo entero de 50 gramos de peso aporta aproximadamente unas 80 calorías.
3) Proteínas: la proteína del huevo es considerada como patrón de referencia para comparar nutricionalmente a las demás proteínas de los diferentes alimentos. Esto se debe a que es la proteína de más alto valor biológico (contiene los aminoácidos esenciales para el organismo). Como hemos mencionado anteriormente son proteínas libres de grasas. En 100 gramos el aporte proteico es de 12 a 14 gramos.
4) Grasas: las grasas que predominan en el huevo son ácidos mono y poliinsaturados (principalmente acido linolénico-Omega 3), muy beneficiosos para el organismo. Su grasa es de fácil digestión.
También están presentes la lecitina, los fosfolípidos y el colesterol.
En 100 gramos de huevo el aporte de grasa es de 10-12 gramos y 550 mg de colesterol.
5) Minerales: excelente fuente de hierro, concentrado especialmente en la yema (dependiendo de la alimentación de las gallinas), fósforo, potasio y magnesio.
6) Vitaminas: se considera al huevo una gran fuente de vitamina B12 (cobalamina), concentrada principalmente en la yema. Así mismo nos aporta vitamina B1 (tiamina), B2 (riboflavina),niacina (vitamina B-3), ácido fólico, vitaminas A, D y E (en la yema).
Es importante señalar que los huevos poseen colina, muy conveniente para la alimentación de mujeres embarazadas, ya que facilita el correcto desarrollo del sistema nervioso central del embrión/feto, junto con el ácido fólico.
Por otro lado los carotenoides, luteína y zeaxantina, ayudan a prevenir trastornos oculares como las cataratas y la ceguera.
Ahora, les detallamos las propiedades de cada una de sus partes:
La cáscara, según sea la especie, será de diferentes colores, lo cual no tiene nada que ver con la calidad del mismo. Está formada por carbonato de calcio y su función es proteger al embrión.
Es importante saber que la cáscara tiene poros, para permitir la respiración, y a su vez esta característica la hace relativamente permeable al paso de ciertos microorganismos patógenos (salmonella).
La clara, de textura viscosa y transparente, está formada en un 90% de agua, el resto lo constituyen las proteínas (ovoalbúmina, la más abundante) y vitaminas. La clara es el único alimento que aporta proteínas sin grasa. Una clara de huevo aporta 17 calorías y 7 gramos de proteína de alto valor biológico.
La yema, es la tercera parte del huevo y porción de color amarillo. Se compone principalmente de grasas, proteínas, vitaminas y minerales.
La intensidad de su color dependerá del alimento (granos y alfalfa) que consume la gallina. Una yema nos brinda 60 calorías y aporta grasas saludables.
El huevo es muy recomendado para personas que realizan deportes. Es un comodín que podemos combinar con ensaladas, verduras cocidas, comerlo solo, incorporarlo en diferentes preparaciones, en el desayuno, reemplazarlo por carnes, etc.